El pasado marzo ha resultado en casi toda la provincia de Palencia mucho más húmedo de lo normal y con temperaturas algo por debajo de las que se esperan para el tercer mes del año. Así se desprende del informe mensual de la delegación en Castilla y León de la Agencia Estatal de Meteorologías (AEMET) y de los datos de las once estaciones meteorológicas en nuestro territorio que gestiona el ITACyL (Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León), cuya precipitación media en marzo alcanzó los sesenta litros por metro cuadrado.

Sin embargo, como muchas precipitaciones fueron localizadas, se constatan notables diferencias de unas estaciones a otras. Entre las once destaca Lomilla de Aguilar, donde casi se alcanzaron los cien litros (en concreto, 96,4 l/m2), mientras en Fuentes de Nava no llegaron a diecisiete (16,8 l/m2).

En todas las demás (Herrera de Pisuerga, Torquemada, Villaluenga de la Vega, Villamuriel de Cerrato, Villoldo, Villaeles de Valdavia, Bárcena de Campos y Abia de las Torres) se superaron los cincuenta litros, excepto en Lantadilla (38,8 l/m2).

Según el mapa adjunto de la AEMET, marzo fue un mes muy húmedo (MH), salvo en el extremo noroeste, donde tan sólo fue algo más húmedo de lo que se espera de este mes (H).

Esta misma fue la tónica en el conjunto de Castilla y León, salvo en la mayor parte de Soria, en amplias zonas de Ávila y en el extremo sur de Segovia, donde fue extremadamente húmedo (EH). El promedio de precipitación de la región prácticamente se ha duplicado (+105 %) con respecto al valor de referencia del periodo 1991-2020, según la delegación de AEMET en esta comunidad. En Soria (170,6 l/m2) y Ávila (157,6 l/m2) se han batido con creces los anteriores récords de marzo en precipitaciones, que databan respectivamente de ese mismo mes en 2013 (135,6 l/m2) y en 2022 (136,6 l/m2).

En todo caso, marzo es un mes muy irregular en cuanto a precipitaciones se refiere en la provincia de Palencia. En el Observatorio de Carralobo en Astudillo (que dirigió durante décadas el hombre del tiempo de ASAJA-Palencia, Mariano Bustillo, con sesenta y cinco años a sus espaldas recopilando datos meteorológicos) consta un récord de 165,7 litros/metro cuadrado de precipitación total de marzo en 1962; y más recientemente superaron el centenar de litros los marzos de 2001 (128,1 l/m2) y 2013 (102,4 l/m2).

En ese mismo punto, recientemente se registró un marzo similar al de este año en cuanto a pluviometría (73,6 l/m2 en 2022), así como otroprácticamente sin precipitación en 2021 (0,7 l/m2). En 1997 no hubo precipitación alguna en Carralobo.

MÍNIMAS SUAVES. En cuanto al termómetro, la AEMET señala que ha sido un marzo muy frío en amplias zonas de Castilla y León (mitad sur y gran parte de León, Burgos y Zamora), y frío en el resto y en la mitad de la provincia de Salamanca. El mapa adjunto muestra cómo en la gran mayoría del territorio palentino marzo fue algo más frío (F) de lo normal, con respecto al periodo de referencia 1991-2020.

Para el conjunto de la región, AEMET ha estimado unas anomalías térmicas negativas de unos dos grados centrígrados y medio en las diurnas y de un grado centígrado en las medias, mientras las mínimas resultaron algo más suaves de lo normal (+0,4 ºC), como corresponde a un mes bastante húmedo, con menos días de cielos despejados que, a estas alturas de año, aún dejan heladas en el interior peninsular.

Dentro de las once estaciones del ITACyL, la mínima de marzo se registró en Fuentes de Nava (-4,8 ºC), pero en todas hubo heladas (la mínima más suave, en Abia de las Torres, con -2,2 ºC). La temperatura máxima se midió en Villamuriel de Cerrato (23,7 ºC), donde su mínima mensual bajó a -2,9 ºC, lo que arroja una oscilación térmica mensual de 26,6 º C.

Marzo no sólo es un mes de amplia oscilación térmica, sino que también es irregular en cuanto a temperaturas, al igual que en precipitaciones. Así, en marzo de 2005 el mercurio llegó a bajar a los -10,2 ºC en Carralobo (Astudillo), mientras en todo ese mes de 2001 no se registró una sola helada (mínima mensual de medio grado positivo). Por las máximas, también se observa esa irregularidad: la estación alcanzó los prácticamente veraniegos 25,5 ºC en marzo de 1989, mientras ese mes en 2013 no superó en Astudillo los 16,5 ºC./