ASAJA considera que las cuantías de las ayudas anunciadas por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) para compensar daños ocasionados en el sector agrario por los graves incendios del pasado verano no responden a la magnitud real de las pérdidas, que superan los doscientos millones de euros. Además, nuestra organización cree que el modelo de compensación establecido es injusto e ineficaz. Por eso, reclama al Gobierno de España un plan de apoyo real y más ambicioso.

ASAJA ve claramente insuficientes las ayudas aprobadas por el Consejo de Ministros para compensar los daños ocasionados por los incendios forestales del pasado verano, cuyo importe total asciende a veintisiete millones de euros.

Nuestra organización reconoce que menos es nada, pero cree que las subvenciones de entre 1500 y 10 000 euros por daños en las explotaciones (de 6000 a 16 000 euros para quienes cuentan con seguro agrario) no alcanzan ni de lejos para cubrir las necesidades básicas de los agricultores y ganaderos afectados.

Además, ASAJA lamenta que algunos municipios, especialmente en Galicia, hayan quedado fuera del reparto, pese a haber sufrido también los efectos devastadores de los incendios.

Más de mil quinientos ganaderos de extensivo se han visto gravemente afectados, muchos de ellos con la pérdida total de animales, instalaciones y viviendas, además de miles de hectáreas de cultivos arrasadas.

INDICADOR INVÁLIDO. ASAJA cree que el modelo de compensación ministerial es injusto e ineficaz. El cálculo de las ayudas en función del 20 % de los ingresos agrarios declarados en 2024 es un criterio arbitrario, que no va a salvar a los agricultores ni a los ganaderos.

Ceñirse a los ingresos agrarios de un solo ejercicio es una distorsión, porque no existe relación directa con el volumen del daño causado por los incendios. Además, al exigirse unos ingresos declarados superiores a mil euros y tener registradas todas las explotaciones, pueden quedarse fuera pequeños productores que también lo han perdido todo.

Por otro lado, también es un inconveniente que las ayudas computen dentro del régimen de minimis, en la medida en que, ante una hipotética crisis sanitaria o de mercado, los productores verán limitadas las ayudas porque ya se habrá consumido parte del margen permitido por la normativa europea. Es un error que puede condicionar la respuesta del Gobierno ante futuras emergencias.

PLAN INTEGRAL, NO PARCHES. Ante esta situación, ASAJA reclama al Gobierno la puesta en marcha de un plan de apoyo extraordinario que contemple ayudas directas más potentes, no sujetas a minimis, líneas de crédito bonificadas, reducciones fiscales (IRPF e IBI rústico), moratorias en préstamos y exenciones en las cuotas de Seguridad Social para los agricultores y ganaderos afectados.

Es necesario un apoyo firme, ágil y real para quienes lo han perdido todo. No podemos permitir que los más golpeados por los incendios se queden atrás. Las medidas anunciadas no están a la altura del drama que viven miles de familias rurales. Se necesita una respuesta urgente y proporcional, no un parche temporal./