El plazo para formalizar los contratos por parte de los titulares de explotación incorporados a las intervenciones de desarrollo rural medioambientales y climáticas (las conocidas como ayudas agroambientales) para iniciar compromisos en el año 2023 concluye el próximo 18 de marzo. Son los contratos corresponden a las solicitudes ya validadas por la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de la Junta de Castilla y León. Para proceder a formalizarlos, las personas titulares deben personarse a la Sección Agraria Comarcal (SAC) correspondiente a su explotación, que es la asignada a su número de expediente.

Con los agricultores y ganaderos incorporados en esta convocatoria, correspondiente a 2023, la Junta alcanza la cifra de 8.400 titulares de explotación, de los cuales casi 1.250 son titulares de explotaciones ecológicas. A la vez, esto permite conseguir ya desde el inicio un avanzado grado de consecución de los objetivos e indicadores que se recogen en el actual Plan Estratégico de la Política Agrícola Común de España (PEPAC) para el período 2023-2027.

La tramitación de las solicitudes se ha realizado mediante aplicaciones informáticas desarrolladas por la propia Consejería que permiten llevar a cabo la determinación de las superficies, animales o colmenas que son finalmente aprobadas, previas validaciones y cruces con diferentes registros y bases de datos, avanzando así en procedimientos de simplificación administrativa.

Todas las solicitudes que cumplían los requisitos normativamente establecidos han sido resueltas en sentido favorable para los agricultores y ganaderos, habiendo sido necesario aplicar criterios de prioridad solo en la intervención agroambiental de superficies forrajeras pastables, donde las solicitudes presentadas han superado las disponibilidades presupuestarias.

La formalización de dicho contrato permitirá a la Consejería iniciar los procesos para realizar el pago anual correspondiente a 2023 a través de la aplicación informática desarrollada por la Junta de Castilla y León, que permite la tramitación telemática de las ayudas directas de la PAC y de determinadas ayudas de Desarrollo Rural cuya gestión y control se integran en el modelo de solicitud única 2023. El pago de esta anualidad será realizado antes de finalizar el primer semestre de este año.

Esta convocatoria es la primera que se efectúa para las ayudas agroambientales, ahora denominadas intervenciones medioambientales y climáticas, con cargo al amparo del PEPAC 2023-2027. Además, la Consejería tiene prevista realizar una nueva convocatoria de incorporación para iniciar compromisos en 2024.

INTERVENCIONES AGROAMBIENTALES. Las intervenciones agroambientales son ayudas cofinanciadas por fondos agrícolas de desarrollo rural de la Unión Europea, por fondos de la Junta de Castilla y León y también del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Los agricultores asumen la realización de compromisos más exigentes respecto de las buenas prácticas de cultivo normales y perciben por ello un importe que varía en función de cada línea de ayuda.

Dentro del conjunto de acciones de agroambiente y clima, destacan las orientadas a prácticas ganaderas extensivas, así como otras que pretenden conservar las razas ganaderas autóctonas que se encuentra en peligro de extinción y también aquellas que favorecen la práctica polinizadora de la apicultura. 

En el ámbito de prácticas agrícolas se encuentran actuaciones que se aplican en superficies agrarias de cultivos agroindustriales sostenibles como es el caso de la remolacha azucarera, el mantenimiento de cultivos permanentes en paisajes singulares y la agricultura sostenible en las zonas de especial protección para las aves. Además, esta convocatoria recoge nuevas ayudas para introducir cultivos minoritarios y una nueva agroambiental de abonado orgánico.

Es de especial interés la intervención en la que incluye a los agricultores ecológicos que ven apoyada su acción al poder incorporarse a estos contratos y percibir ayudas que reconocen los beneficios ambientales de la práctica ecológica y la subsiguiente aportación al sector de materias primas e, incluso, productos elaborados que llegarán finalmente al consumidor./