La Junta de Castilla y León ha difundido sus estimaciones de superficies, producciones y rendimientos de la actual campaña de cereales de invierno, que prevén un rendimiento medio que ronda los 1.980 kilos por hectárea en el conjunto de la comunidad. En la provincia de Palencia, la estimación se aproxima a los 2.350 kilos de media (incluidos tanto los regadíos como los secanos), la tercera más alta de la región, solo superada por León y Burgos, con 2.425 y 2.414 kilos, respectivamente. Se trata, no obstante, de rendimientos sensiblemente inferiores a los de una cosecha normal en nuestra provincia, como consecuencia de la sequía.

Según los datos facilitados por la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, la superficie cerealista de invierno de esta campaña supera ligeramente las 255.700 hectáreas, con el habitual predominio del trigo (algo más de 116.600 ha) y de la cebada (cerca de 107.000 ha), seguidos ya a distancia por la avena (15.340 ha), el centeno (12.931 ha) y el triticale (3.845 ha).

El avance de producción de cereales de invierno que maneja la administración autonómica para la provincia de Palencia es de 600.400 toneladas, lo que representaría algo más del 18,5% del total estimado para toda Castilla y León (cerca de 3.240.000 toneladas).

DOS AÑOS DE DESCENSO CONSECUTIVOS. Esta cosecha provincial supone un descenso muy significativo con respecto a la que se alcanzó en la campaña anterior, que rondó el millón de toneladas (1.009.025 t). De confirmarse la estimaciones de la Junta, la producción de cereal de invierno en Palencia habría caído este año el 40,5%; pero hay que recordar que ya la campaña 2021-2022 registró un 20,4% de descenso en la producción con respecto a la anterior.

Más acusado resulta, en cualquier caso, el descenso a nivel regional, debido a que la sequía de la primavera azotó aún con más gravedad a otras provincias. En concreto, la Consejería de Agricultura estima una producción en toda Castilla y León para esta campaña de 3.239.770 toneladas, frente a 6.553.870 de la anterior, lo que supone menos de la mitad de cosecha (-50,6%) con respecto a la de 2021-2022, que también a nivel regional se había reducido cerca del 29% en relación a la 2020-2021.

Por cultivos, el avance de rendimiento de la Junta para la provincia de Palencia, incluidos secanos y regadíos, prevé una media de 2.554 kilos por hectárea en el trigo, mientras las cebadas arrojan un promedio de 2.200 kilos. El triticale rendiría una cifra similar (2.222 kg/ha), en tanto la avena y el centeno superarían ligeramente los dos mil kilos por hectárea de promedio (2.088 y 2.042 kg/ha, respectivamente).

DIFERENCIAS PROVINCIALES. Los máximos rendimientos en Castilla y León, según las estimaciones de la administración autonómica, corresponderían a los 3.000 kg/ha que, de promedio, darán los trigos cultivados en León (provincia que, además de contar con una proporción mayor de regadío, no se ha visto tan afectada como otras por la sequía).

De hecho, en el otro extremo se sitúan rendimientos medios tan exiguos como los previstos para el centeno en Ávila (413 kg/ha), la provincia más castigada, con un rendimiento general para los cereales de invierno que apenas llegará a los 951 kg/ha), menos de la mitad del promedio de toda Castilla y León (1.979 kg/ha).

También se sitúa muy por debajo de esas cantidades la provincia de Soria —con 1.371 kg/ha—, mientras las de Zamora, Segovia y Valladolid no van a llegar a rendimientos medios del cereal de invierno de 1.800 kg/ha./