La Lonja de León ha apuntado en las últimas sesiones a que los cereales podrían haber tocado suelo y empezar a repuntar. Después de todo un año 2023 con una tónica general de bajada en los mercados, parece que el fin de año se ha animado en las cotizaciones y las perspectivas son más positivas. En la reunión celebrada este miércoles 20 de diciembre en Santa María del Páramo, todos los cereales subieron salvo la avena, que sigue estabilizada en los 258 euros tonelada desde hace prácticamente un mes.

Por su parte, la cotización de la tonelada de trigo, cebada y maíz repunta tres euros en la sesión, hasta situarse en 229, 213 y 225, respectivamente. Dos euros remonta la tonelada de centeno, hasta los 202 euros, todavía uno por debajo del precio que alcanzaba hace un mes. El maíz iguala ese precio del pasado 22 de noviembre, en tanto el trigo y la cebada ya han logrado recuperar ese terreno e incluso avanzar ligeramente.

Desde la Lonja de León explican que los precios actuales de cotización de los cereales a nivel internacional son poco atractivos para los agricultores, a lo que se suma que los gastos para afrontar la nueva campaña no han bajado en la misma medida, con lo que «la rentabilidad a día de hoy es nula y se da por hecho que la superficie caerá a nivel mundial».

CONDICIONANTES INTERNACIONALES. Las mismas fuentes añaden que la tendencia «a la larga no estará exenta de nubarrones» y recuerda que la pasada semana, solo por el mero hecho de que la Reserva Federal de Estados Unidos mantuviera los tipos de interés, el dólar se desplomó y animó las importaciones, lo que distorsiona el precio del cereal nacional.

Asimismo, a corto plazo la Unión Europea tendrá que revisar la medida que tomó de eliminar los aranceles con Ucrania, lo que ha afectado a toda Europa (en especial, a los países del Este, como Polonia, Hungría, Eslovaquia, Rumanía y Bulgaria).

CAÍDA INTERANUAL DEL 40% EN EL GIRASOL. Por lo que respecta al girasol, la Lonja de León repitió los precios de la anterior semana. Por tercera sesión consecutiva, el girasol convencional se fijó en los 365 euros/tonelada y el alto oleico en 385 euros/tonelada.

Aunque el girasol ha subido en torno a doce euros la tonelada con respecto a los precios con los que arrancó la campaña, ni de lejos se está cotizando como hace un año, cuando en la misma Lonja de León se marcaban los 630 euros/tonelada en la práctica totalidad del otoño de 2022 (es decir, una caída interanual que supera el 40 %, que en los últimos doce meses no se ha trasladado en esa proporción a los puntos de venta ni en la botella de aceite de girasol, ni en los alimentos donde es uno de sus ingredientes básicos)./