La Federación Nacional de Comunidades de Regantes (FENACORE), que representa a más de 500.000 agricultores y más de dos millones de hectáreas, alertó hoy de un “invierno caliente” con movilizaciones para protestar contra la amenaza de no tener suficiente agua para regar durante los próximos años.

Todo ello motivado por los nuevos planes hidrológicos, que serán aprobados en primavera sin tener en cuenta la valoración experta del regadío: un sector discriminado a pesar de aglutinar al 70% de los usuarios del agua.

En concreto, los regantes advierten de que la planificación hidrológica está desenfocada al anteponer el extremismo ecologista a la satisfacción de las necesidades básicas como el agua, de las que depende la producción de alimentos. Asimismo, estos planes atentan gravemente contra el regadío, tal y como han hecho saber por carta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, trasladándole el malestar del campo por la discriminación que sufre el regadío en la agenda política.