La Federación Nacional de Comunidades de Regantes de España (Fenacore) ha pedido que el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible (MITMA) asuma las competencias del agua para impulsar las importantes inversiones pendientes en infraestructuras hidráulicas. La reclamación se ha trasladado al Gobierno de España tanto a través del citado ministerio como a los de Presidencia y al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, actual competente en la materia.
Fenacore cifra en unos 3000 millones de euros el actual déficit de inversión en obras hidráulicas y embalses. ASAJA viene denunciando desde hace tiempo en todos los niveles de representación (nacional, regional y provincial) el déficit de almacenamiento y regulación que padece nuestra agricultura.
Esta carencia es un lastre para el desarrollo y la rentabilidad económica del sector, problema que también afecta a la agricultura de Palencia, como reiteradamente ha expuesto nuestra organización.
LECCIÓN RECIENTE. La federación de regantes españoles aboga por retomar esas inveriones pendientes a través de un ministerio como el MITMA con capacidad, responsabilidad, experiencia y presupuesto necesarios para ejecutar esas infraestructuras. Según Fenacore, esa necesidad sería una de las principales lecciones que dejó la gota fría de octubre de 2024, que afectó fundamentalmente a la Comunidad Valenciana.
En concreto, Fenacore reclama al Ejecutivo de España que la Dirección General del Agua pase a depender del MITMA, ya que la prioridad de la planificación hidrológia debería atender al cumplimiento de las actuaciones y medidas ya aprobadas mediante un real decreto en 2023 en los difeerentes planes de cuenca, que incluyen veintisiete obras de regulación.
GIRO PERJUDICIAL. La entidad que aglutina a numerosas entidades federadas, con más de 700 000 regantes y prácticamente dos millones de hectáreas (es decir, más del 80 % del regadío nacional) recuerda que entre 1960 y 2000 se construían de media 182 embalses cada década; pero desde que en 1996 la Dirección General de Obras Hidráulicas, entonces en el Ministerio de Fomento, pasó a denominarse Dirección General del Agua y a pertenecer al Ministerio de Medio Ambiente, se ejecutan una veintena en cada década.
Fenacore lamenta que el agua y las obras hidráulicas hayan ido perdiendo relevancia y presupuesto en la agenda política, lo que se evidencia por el frecuente traslado de estas competencias de unos ministerios a otros, sin avances reales en la ejecución de las actuaciones necesarias. ASAJA también se ha pronunciado de forma repetida en esa misma línea de impulsar las obras en esta materia.
NECESIDAD NACIONAL. Los regantes alertan de que, en ausencia de estas inversiones, España no puede garantizar el suministro de agua en el futuro, ni paliar los problemas derivados de los fenómenos meteorológicos extremos (inundaciones, sequías…), ni asegurar la producción de alimentos y la soberanía en esta materia, cuestión estratégica, máxime en la actual coyuntura mundial, donde se suceden los conflictos y decisiones que convulsionan los mercados internacionales.
El presidente de Fenacore, Juan Valero de Palma, subraya que más del 29 % de las infraestructuras hidráulicas de interés general no se han construido pese a haberse aprobado en los diferentes planes de cuenca y contar con los preceptivos informes./