La Lonja de León celebrada esta semana ha comenzado a dar cotización del girasol de esta campaña. El verano seco y caluroso ha acelerado el ciclo, por lo que el nivel de humedad en amplias zonas viene permitiendo ya la cosecha. Las operaciones ya visadas sitúan la tonelada de girasol tradicional o linoleico a 425 euros, y la del alto oleico a 515 euros. Los agricultores palentinos cultivan esta campaña cerca de 46 000 hectáreas de girasol, unas siete mil en regadío (15,4 % del total de la superficie), según las declaraciones PAC 2025.

Según las estimaciones de la Junta de Castilla y León, se esperan unos rendimientos de 900 kilos por hectárea en los secanos y de unos 1700 kilos por hectárea en los regadíos. Son bastante decepcionantes, máxime si se consideran las expectativas que había con esta oleaginosa en los primeros meses de desarrollo.

En cualquier caso, se trata de unos promedios que pueden ofrecer diferencias significativas según cada parcela, especialmente en el girasol de secano, teniendo en cuenta la importancia de las lluvias en el momento adecuado para la nascencia —aspecto éste que en esta campaña fue relativamente buena—, y sobre todo, al considerar la casi absoluta ausencia de precipitaciones los dos últimos meses, lo que ha mermado mucho el desarrollo de la planta en su fase determinante de granado.

MÁS VALORADOS QUE HACE UN AÑO. Estos precios iniciales son superiores a los que presentaron el girasol linoleico (+6 %) y el alto oleico (+24 %) en la primera cotización de la pasada campaña, en la que arrancaron a 400 y 415 euros/tonelada, respectivamente; si bien fueron escalando conforme avanzaron las semanas, para alcanzar ya mediado noviembre a 445 y 470 euros/tonelada. La diferencia con respecto a estos últimos precios de la campaña anterior es negativa en el caso del girasol tradicional (-4,5 %), pero sigue siendo positiva en el alto oleico (+9,6 %).

Nos hallamos, pues, ante unos buenos precios iniciales (sin llegar al extremo que alcanzaron las campañas de 2021 y 2022, tan condicionadas por la incertidumbre sobre el abatescimiento por la guerra de Ucrania), que en parte se explican por ese menor rendimiento del que se aventuraba por los niveles de nascencia.

CEREAL Y FORRAJE. La Lonja de León, en la mesa de cereal, recogió otra rebaja de un euro en el trigo, que opera ya a 192 euros/tonelada, tres menos que el precio inicial de la campaña actual en esa misma plaza, hace ahora dos meses. Asimismo, ha dejado de cotizar el maíz seco, ante la falta de operaciones, a la espera de que próximamente empiece la cosecha del maíz destino a secadero.

Por su parte, en la mesa de forrajes repitieron todas las categorías, salvo el forraje básico, que sube otros cinco euros por tonelada, llevado por la disminución de pasto como consecuencia de este verano seco y caluroso, sin olvidar los daños de los incendios./