Ayer se reunió el Consejo de Ministros, como hace todas las semanas, y en él una de las cosas que se aprobó fue el Plan de Seguros Combinados para el año 2022. Este plan se viene aprobando desde que en 1979 se publicó la Ley de Seguros Agrarios Combinados, aprobada el veintiocho de diciembre de 1978 y primera ley de la democracia -cabe recordar que la Constitución Española fue aprobada en referendum el día 6 de diciembre de 1978-.

Dentro del plan se incluyen todas las líneas de seguro que tienen inicio de la contratación en el año natural 2022, los riesgos que van a ser cubiertos, los estudios que se van a realizar, las nuevas coberturas que se van a incluir y otra serie de cosas, entre las que destacan las subvenciones estatales que se aplicarán al seguro agrario, que este año aumentarán hasta los 256 millones de euros, cantidad similar al año anterior

En el año 2012, en plena campaña de ajuste presupuestario debido a la crisis de aquella época, se produjo un recorte en las subvenciones que percibían los contratantes del seguro agrario. Tres fueron las medidas que se tomaron: deducir los primeros sesenta euros de subvención por asegurado y plan, reducir diez puntos porcentuales a la subvención base, que perciben prácticamente todos los asegurados, y eliminar la subvención al recargo que tienen ciertas líneas de seguro.

Desde ASAJA se intenta que la situación vuelva a su origen, algo que hasta el plan actual sólo se había conseguido en cuanto a la subvención del recargo y, en parte a recuperar los diez puntos porcentuales perdidos, aunque en este caso sólo lo pueden percibir aquellos con derecho a subvención por ser joven agricultor.

Para este nuevo plan se incrementará la subvención a las Titularidades Compartidas buscando que sea una figura más atractiva para las explotaciones agrarias, se dará una subvención a los nuevos contratantes, con el fin de facilitar el acceso al seguro, se subirá levemente la subvención base y habrá un aumento considerable en la subvención a las pólizas de ovino y caprino, que tienen una bajísima implantación pese a la amplitud de sus coberturas.