BLAIR DA UNA PATADA A ESPAÑA EN EL TRASERO DE FRANCIA

La actitud del primer Ministro Británico en la pasada Cumbre de Bruselas y las recientes declaraciones vertidas en su discurso ante el Parlamento Europeo en visperas de iniciarse la presidencia europea del Reino Unido, constituyen un grave ataque a la Política Agraria de la UE.

BLAIR DA UNA PATADA A ESPAÑA EN EL TRASERO DE FRANCIA




  • PEDRO BARATO TRIGUERO
  • La actitud del primer Ministro Británico en la pasada Cumbre de Bruselas y las recientes declaraciones vertidas en su discurso ante el Parlamento Europeo en visperas de iniciarse la presidencia europea del Reino Unido, constituyen un grave ataque a la Política Agraria de la UE. En un principio, podríamos pensar que este ataque va dirigido a Francia, primera potencia agraria europea y, por tanto, primera receptora de los fondos de la PAC.

    Sin embargo, no debemos olvidar que España recibe anualmente más de seis mil millones de euros en retornos agrarios, siendo el segundo Estado Miembro receptor de estos fondos. La diferencia estriba en que Francia tiene unos altos rendimientos de sus cultivos mientras que los nuestros son los más bajos de Europa; que Francia es un país rico y puede permitirse financiar a sus agricultores, algo dudoso en nuestro país; y que la clase política francesa es muy sensible a los intereses de sus agricultores, algo que nunca han demostrado los políticos en nuestra España democrática.

    Por tanto, nuestra agricultura podría ser la más perjudicada si prosperan las propuestas de Tony Blair de una cofinanciación, una renacionalización o incluso una eliminación de la PAC.

    Afirma Blair que la PAC se lleva el 40 % del presupuesto comunitario, y que solo repercute en el cinco por ciento de la población y que los fondos deberían destinarse a otras políticas más sociales y a investigación.

    Sin embargo, olvida decir que el presupuesto de la Unión es de poco más del uno por ciento de la Renta Nacional Bruta de la U.E., varias veces menos de lo que los Estados Unidos destinan a la Reserva Federal.

    También olvida que la agricultura no es solo la producción agraria y que su actividad involucra a una industria complementaria (semillas, tratamientos, maquinaria, transporte, embalaje, etc.) que sin ella desaparecería del medio rural. También parece olvidar las funciones externas de la agricultura en la ordenación territorial, en la fijación de la población al medio rural y en la conservación del paisaje y el medio ambiente.

    Olvida también decir que la PAC es la única Política verdaderamente común de la UE y que hunde sus raíces en la propia construcción europea. Por tanto, al ser la única política común, no parece tan extraño que acapare una parte importante – cada vez más baja- del presupuesto. Sin ir más lejos, si unimos los gastos en defensa de los Estados Miembros significaría el 4 % del PIB europea.

    Dice Blair que hay que reformar la PAC. Sin embargo, olvida decir que la ultima reforma tuvo lugar en 2003 y que su ministro de agricultura estaba en las negociaciones. También olvida que no puso ningún reparo a que sus ganaderos recibieran en la segunda mitad de los 90 más de mil millones de euros para paliar los efectos de la mayor crisis alimentaria, crisis que también parece olvidar fue provocada por sus industrias fabricantes de piensos para animales. Si no hubiera habido PAC, estos ganaderos estarían completamente arruinados.

    El primer ministro británico ha hecho gala de un gran olfato y oportunismo político, aprovechando la ruptura del eje franco-alemán, para erigirse en el único líder europeo e imponer sus posiciones en el Consejo Europeo, manteniendo el cheque británico y sembrando dudas sobre la PAC.

    Es absolutamente necesario que Europa tenga un líder fuerte que garantice el futuro de la agricultura y de nuestras explotaciones. Sin embargo, para ser un líder europeo no basta con sonreír mientras se deambula en solitario por los pasillos del Consejo.

    Madrid a 1 de Julio de 2005

     

    *Presidente Nacional de ASAJA