CONCENTRACIONES PARCELARIAS

A tenor de las publicaciones que aparecen en el Boletín Oficial de Castilla y León, parece que la consejera de Agricultura está cumpliendo su compromiso con varios alcaldes de acometer infraestructuras y entregar las parcelas en varias concentraciones parcelarias iniciadas hace dos décadas.

CONCENTRACIONES PARCELARIAS 

A tenor de las publicaciones que aparecen en el Boletín Oficial de Castilla y León, parece que la consejera de Agricultura está cumpliendo su compromiso con varios alcaldes de acometer infraestructuras y entregar las parcelas en varias concentraciones parcelarias iniciadas hace dos décadas. Todo perfecto si a la vez, con sus propios medios, la Consejería preparase los títulos de propiedad para entrega al notario y registrador, en vez de retrasarlo también durante décadas con el consiguiente trastorno para las ventas, donaciones, herencias y sobre todo a la hora de depositar la propiedad como garantía de un préstamo. 

Si la Junta entra en racha de poner al día sus concentraciones parcelarias y llegan fondos frescos del nuevo Programa de Desarrollo Rural, a la vez que nueva legislación en la materia de la mano de la nueva Ley Agraria, es el momento de acometer un ambicioso proyecto de reconcentración parcelaria en nuestra provincia que seguramente está en mente de todos los agraristas. Me refiero a la amplia superficie de cultivo de secano que quedaría en el triángulo formado por los ríos Esla y Cea y la carretera nacional 601 que une León y Valladolid. Sin duda las mejores fincas de secano, sin posibilidad alguna de transformarse algún día en regadío, que se concentraron parcialmente hace más de cuarenta año y cuyas parcelas no reúnen ya los estándares que exige una agricultura moderna. Y hago este planteamiento a sabiendas de que no es algo faraónico imposible de ejecutarse, más bien al contrario, es un proyecto asumible económicamente, aceptable por parte de los propietarios de tierra y demandado por los agricultores. Estando como está la propiedad investigada y la zona cartografiada, y aprovechando la mayoría de los trazados de caminos y desagües, esto es más cuestión de voluntades políticas que de disponibilidad de recursos públicos. Sería un proyecto similar a la reconcentración de Payuelos, que se resolvió en tres o cuatro años y se entregaron las parcelas en 2005, con la diferencia que aquello era con vistas al regadío y esto es para seguir cultivando de secano. Mucho más fácil. 

Artículo de opinión de José Antonio Turrado publicado en La Nueva Crónica del viernes 27 de junio de 2014.