La organización agraria ASAJA recibe con satisfacción el avance, aunque lento, de las concentraciones parcelarias de Payuelos, y atribuye dicho avance a la presión que se está ejerciendo desde este sindicato agrario.

LA PRESIÓN CONSTANTE DE ASAJA HA SIDO DECISIVA PARA IMPULSAR LAS CONCENTRACIONES DE PAYUELOS

La organización agraria ASAJA recibe con satisfacción el avance, aunque lento, de las concentraciones parcelarias de Payuelos, y atribuye dicho avance a la presión que se está ejerciendo desde este sindicato agrario. La organización agraria teme no obstante que los trabajos técnicos para sacar adelante el proyecto se hayan hecho de forma precipitada para adelantar un tiempo que se había perdido de forma injustificada en los meses pasados, y que se haya producido alguna chapuza que derive en una batería de alegaciones que retrasen aún más la concentración.

Y si bien de una forma u otra se ha cumplido con el último compromiso de la Junta con el sector de tener todas las demarcaciones al menos en fase de proyecto para el comienzo de la primavera en la que ahora estamos; no se está cumpliendo con el compromiso de tener en fase de «acuerdo de concentración» las fincas de las demarcaciones 1,2,3,4 y 10, cuyo proyecto se publicó en agosto de 2002 y al que los afectados presentaron las correspondientes alegaciones.

Si de verdad la Junta fuese diligente con esta obra de concentración, en las cinco primeras demarcaciones tendrían que entregarse las nuevas parcelas en el mes de septiembre para poder hacer ya las siembras del próximo año en las mismas, y en las cinco demarcaciones más retrasadas de las que ayer la Junta presentó el «proyecto de concentración», debería entregarse la nueva propiedad a principios de 2004. No obstante, ni en campaña electoral la Junta se ha atrevido a comprometerse con una fecha, por lo cual el sector sigue con la misma incertidumbre y por lo tanto sin poder tomar decisiones sobre cambios de cultivo o inversiones en equipos de riego.

Hay que tener en cuenta que la concentración parcelaria es una obra complementaria a la transformación en regadío en la comarca, que ASAJA la considera de mayor interés y urgencia que la construcción de las propias acequias, y que no tiene apenas coste para la administración ya que en principio se trata tan solo de reordenar la propiedad sin acometer obra civil alguna salvo el amojonamiento de las fincas. Por todo ello, y dado que depende tan solo de trabajo administrativo y no de un presupuesto, ASAJA no llega a entender los sucesivos retrasos y la falta de compromiso con una fecha concreta para entregar la nueva propiedad.

Tan solo con tener concluida la concentración, y aun no teniendo hecha la transformación en regadío, se incrementaría la rentabilidad de las explotaciones al abaratar los costes, se podrían introducir cultivos permanentes como la alfalfa y el viñedo, se podría regar aun en precario haciendo inversiones que serían aprovechables también en el futuro, y se acometerían mejoras agronómicas en las fincas.

León, 20 de mayo de 2003.