Los cereales de invierno han dejado de cotizar ya en Lonja de León a la espera de la próxima cosecha. Si hace una semana ya no se dio precio de la cebada, este miércoles, 18 de junio, se ha cerrado la tablilla para el trigo, el centeno y la avena. Este último cultivo se ha despedido con la mayor caída interanual en esta mesa: si hace un año su precio por tonelada al final de la campaña era de 260 euros, en la que acaba de concluir ha terminado a 160 euros, lo que representa un descenso superior al 38 % en los últimos doce meses.

Con las cosechadoras ya engrasadas y, pese a una perspectiva de buenos rendimientos, la pesadumbre cunde entre nuestros agricultores cerealistas. Recordemos que, según las solicitudes de la PAC de 2025, se van a cultivar esta campaña en la provincia de Palencia más de 275 000 hectáreas de cereales de invierno —136 000 de trigo y 107 000 de cebada—, cuyo nivel actual de precio resulta desalentador.

Cabe esperar que la Lonja de León, como ya sucedió en 2024, retome la cotización de la cebada a primeros de julio; y la del trigo, a mediados del mismo mes, una vez se constate un volumen significativo de operaciones con granos de la nueva cosecha. Y es probable que la avena y el centeno regresen ya para la segunda quincena del próximo mes.

La supresión de la cotización es una medida oportuna, para evitar movimientos especulativos de última hora que, en el actual contexto bajista y ya con escasas operaciones, no pueden sino perjudicar a nuestros agricultores. Basta recordar lo sucedido esta misma semana en la Lonja de Salamanca: el pasado lunes 16 cayó la tonelada de cebada quince euros en esa plaza, tras pedir los compradores un descenso de veinte euros y reclamarse la repetición por parte de los agricultores; mientras la avena perdió diez euros por tonelada.

VOLATILIDAD. Desde la Lonja de León explican que además la semana presenta volatilidad en los mercados internacionales, debido a la situación bélica en Oriente Medio, que acarrea una subida del precio del petróleo. Por lo que respecta a la situación meramente agronómica, añaden que «en Francia las altas temperaturas y el clima seco adelantarán la cosecha de cebada a la vez que aumenta la preocupación por los rendimientos del trigo a pocas semanas del inicio de la cosecha.

Si la caída interanual del precio de la avena ronda el 38,5 %, también han descendido de manera alarmante en los últimos doce meses la cebada (-14 %) y el trigo (-9 %), mientras la bajada del centeno se amortiguó algo (-7 %).

En todo caso, recordemos que estas pérdidas de valor en los últimos doce meses se acumulan a las precedentes, ya que el precio del cereal viene padeciendo una tendencia bajista desde el otoño de 2022. De entonces acá, el trigo, por citar el principal cultivo de la provincia de Palencia, se ha depreciado según las operaciones visadas por la Lonja de León más del 46 %; y la cebada, segunda producción por superficie, el 47 %./