El Consejo de Ministros ha aprobado un Real Decreto por el que se modifican las condiciones de contratación en el sector lácteo. El objetivo es el cumplimiento de la Ley de la Cadena Alimentaria, por la que cada operador debería pagar al eslabón anterior un precio igual o superior al coste asumido, algo que hasta ahora no se ha conseguido, con el ganadero como principal perjudicado.

Entre las principales novedades que se recogen en el Real Decreto se incluye la posibilidad de que los productores con contratos suscritos a precio fijo, que tengan una duración superior a seis meses, soliciten una nueva oferta de contrato. Esta revisión podrá solicitarse en los casos en los que se demuestre que durante al menos tres meses durante el periodo de vigencia del contrato se haya producido un incremento sostenido y continuado de los costes de producción que provoque que los productores acaben percibiendo un precio por la leche entregada inferior a éstos.

En los últimos meses, el incremento sostenido de los costes de producción compromete la viabilidad de la producción láctea, situación que se ha agravado tras la invasión rusa de Ucrania y que ha llevado al Gobierno a adoptar medidas de apoyo urgentes, como la ayuda nacional directa a los productores de leche.