En estos días se está iniciando en Palencia el primer corte en el cultivo de la Alfalfa en el que nuestra provincia es la segunda productora en Castilla y León, tras Valladolid. En cambio, Palencia es la provincia que más hectáreas destina a este cultivo, son 32.264 hectáreas la campaña pasada, de las cuales, 9.989 son de regadío y 22.275 de secano. Es muy destacable la superficie de secano, donde Palencia es la principal productora de alfalfa de toda España y la que más superficie dedica a este cultivo.

Una vez segada la alfalfa, parte se empaca después de secarse al sol en campo y otra parte es transportada a las deshidratadoras que tenemos en la provincia, que en concreto son cinco, ubicadas en Carrión de los Condes, Villoldo, Astudillo, Fuentes de Nava y Becerril de Campos. El producto final se destina a la exportación y a comercializarlo para el consumo interno ganadero de nuestro país.

La producción total nacional de alfalfa deshidratada alcanzo la cantidad de 1,45 millones de toneladas, la mayoría destinadas a la exportación, siendo los principales destinos Emiratos Arabes, Arabia Saudí, y China.

El inicio de la pandemia ha complicado de forma importante la exportación de alfalfa, principalmente por el precio de los fletes, que han llegado a multiplicarse por cuatro, y la poca disponibilidad de los contenedores. Todo ello unido a las continuas cancelaciones de barcos, hace que esta campaña genere muchas dudas, también provocadas por los altos costes energéticos, tanto para transformar la alfalfa, como para su transporte internacional.