ASAJA Soria ha recibido con estupefacción la noticia de que el denominado Centro de los Alimentos de Soria desarrollará un proyecto para crear carne artificial o análogos de carne a partir de hongos.

La organización profesional agraria se pregunta qué hace el Ministerio de Ciencia e Innovación financiando proyectos que ya se ha demostrado que han ido al garete. La prueba está en las startup que querían poner, nunca mejor dicho, patas arriba la alimentación mundial con sus promesas. Una década después de las primeras ‘seudohamburguesas’, consumidores y distribuidores de todo el mundo le dan la espalda por precio, salubridad y sabor.

Al parecer, la carne sin carne ya ha dejado de ser una innovación que cambie el mundo y no deja de ser otra moda alimentaria cuya novedad se está agotando. La tendencia de los que al principio estaban entusiasmados con la carne falsa, a los que no les importaba el sabor o la textura, va en declive porque cada vez más personas echan un vistazo de cerca a la lista de ingredientes y no saben realmente qué se están comiendo.

Inversores tan conocidos como Bill Gates y Leonardo DiCaprio ya han visto reducidos los beneficios porque no se está consumiendo como estaba previsto. No cuajan estos ultraprocesados y de ínfima calidad, muchas veces relacionados con alimento para mascotas. No es de extrañar que se empiece a extender la idea de que “si cualquier otro alimento oliera así, to tiraríamos a la basura”.

La carne soriana solamente tiene carne. Probablemente sea el producto del que casi nadie es alérgico; es algo que ya está inventado. A la vez, la OPA quiere destacar la variedad y la calidad de las setas que hay en la provincia, e invita a todos los consumidores a degustarlas, pero considera que ‘crear’ carne a partir de setas es un sinsentido de principio a fin.

ASAJA apunta que más le valía al Ministerio poner en marcha proyectos para impulsar la exportación de picadillo, torreznos, jamones, chorizos, carne de ternera, corderos y otras carnes de la provincia y trabajar para transmitir a la sociedad el mensaje de que el sector cumple con la exigente normativa ambiental, de bienestar animal y sanitaria; además de proporcionar productos sanos y asequibles.

ASAJA seguirá con su defensa a ultranza de los productores de carne de la provincia, como ya lo ha hecho sin ir muy lejos con la movilización: ‘El mundo rural despierta. ¡Basta ya!’ que fue una acción reivindicativa con el reparto de 2.000 bandejas de carne en pleno centro de Soria. También: ‘Éste es el verdadero fruto de nuestro esfuerzo y el orgullo de nuestra tradición. ¡Qué rico, qué bien huele!, en el que la asociación repartió torreznos, chorizos y jamón. Y en la Feria de Almazán, con el asado de una ternera. Todo para reclamar precios justos, poner el contrapunto a ataques contra el consumo de carne como el del ministro Garzón y dejar claras las excelentes propiedades nutricionales, lo innegable de ser motor económico en zonas rurales, la trazabilidad y seguridad alimentaria, su inmensa variedad y versatilidad y, por si fuera poco, avalada por prestigiosos cocineros.

En la Feria de Almazán, ASAJA organizó el asado y reparto de una ternera para destacar la calidad de las carnes de la provincia.