ASAJA, Upa y Coag, en unidad de acción, han pedido el día de San Valentín que se escuche al campo, menos controles absurdos y que Bruselas no decida lo que se cultiva en Soria

El 14 de febrero el campo soriano se ha movilizado. El lema elegido ha sido: ‘queremos seguir alimentando a tu familia’. La actividad reivindicativa arrancó a primera hora, con cortes de las vías principales de acceso a la ciudad en la zona del Caballo Blanco, lo que ha provocado largas colas de vehículos especialmente en la carretera nacional 122, y posteriormente con una manifestación que ha llevado a medio millar de profesionales de la agroganadería a las puertas de la Subdelegación del Gobierno y después a las de la Delegación Territorial de la Junta en Soria. 

La presidenta de ASAJA Soria, Ana Pastor ha garantizado que desde las OPAS «se seguirá dando voz al campo soriano en los problemas que se están atravesando» y ha pedido unidad, ya que «los problemas son de todos. Además, seguiremos acometiendo todas las acciones reivindicativas que consideren nuestros socios hasta que se vean satisfechas nuestras peticiones».

En cuanto a las tres grandes reivindicaciones que se han trasladado, Pastor ha apuntado a una «PAC absurda que exige muchas cosas que no se pueden llegar a cumplir, con leyes incompresibles como la del Bienestar Animal». A ello se suma una «excesiva burocracia que nos ahoga con los trámites y que obliga a dedicar más tiempo a ello que a trabajar». El tercer punto es el problema en los costes ya que «los precios de producción son mayores frente al desplome de lo que se vende. Como ejemplo está el trigo, que hoy mismo está más de 100 euros la tonelada más barato que en febrero de 2023». Asimismo, la presidenta de ASAJA ha querido tener unas palabras de reconocimiento para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, que han mostrado «una vez más su profesionalidad. Entre todas las partes ha habido diálogo y entendimiento y se ha podido desarrollar nuestra protesta por cauces razonables, pacíficos y a la vez combativos sin ningún tipo de incidente».

Entre las peticiones que se han dejado encima de la mesa del subdelegado del Gobierno, Miguel Latorre, y de la delegada de la Junta, Yolanda de Gregorio, también destacan las siguientes:

  • Como medida de calado, un rediseño de la PAC para que se centre en la producción agraria y no únicamente en imposiciones medioambientales que complican la tarea de agricultores y ganaderos hasta hacer casi inviable su trabajo, como venimos reclamando. Exigencias que no vienen acompañadas de contraprestaciones económicas que las compensen. Flexibilización inmediata de la PAC actual, incluida la libertad total de elección de cultivos y barbechos por parte del agricultor.
  • Paralización de las negociaciones de acuerdos entre la Unión Europea con MERCOSUR, Nueva Zelanda, Chile, Kenia, India, México, Australia… Aumentar los controles en la frontera con otros países para garantizar que sus productos cumplan con las mismas normativas a los que son obligados los productores europeos. Y un control para que estas importaciones no superen las necesidades de estos productos hundiendo los mercados, como a veces ocurre con el cereal o girasol.
  • Modificación y ampliación de la Ley de la Cadena Agroalimentaria para prohibir las prácticas desleales y que los precios de los agricultores y ganaderos cubran realmente los costes de producción. Que la AICA (Agencia de Información y Control Alimentario) aplique sanciones económicas que sean disuasorias y que se amplíen sus recursos de control.
  • Medidas que faciliten la incorporación de jóvenes al sector, eliminando las trabas y condicionantes que afectan a los jóvenes y al resto de explotaciones.
  • Que todas las administraciones reduzcan hasta límites razonables la tremenda carga administrativa que soporta el sector agrario, hasta el punto de suponer costes económicos y de tiempo insoportables, abandonando los inasumibles objetivos de la agenda 2030 para el sector en especial en temas fitosanitarios, zoosanitarios y fertilizantes.
  • Una política fiscal que compense al sector, perjudicado por el aumento de costes derivado de la guerra de Ucrania y otros conflictos, así como de la sequía. Y en concreto una actualización del límite del umbral para permanecer en el Régimen de Estimación Objetiva por Módulos y una rebaja de la carga fiscal en Directa.
  • Una mejora del sistema de seguros agrarios con el fin de reforzar esta necesaria herramienta desactivando las penalizaciones individuales especialmente por el motivo generalizado de las últimas sequías.
  • Apoyo al sector ganadero, con revisión de las normativas estatal y europea que condicionan su rentabilidad (sanidad y bienestar animal, gestión de residuos, lobo…).
  • Cambio de rumbo en la presión ambiental en las normativas nacionales y autonómicas con un mayor peso de los intereses agrarios y alimentarios en estos ámbitos sobre otros supuestamente ambientales, en asuntos como el control de los daños de la fauna salvaje, el manteamiento de cauces y freno a la instalación de parques de renovables en terrenos de interés agrario. (Ya sean para verter en la red o para hidrógeno verde). Y modificación normativa que retire la herramienta Interés Público que permite a estas empresas adueñarse de los terrenos de las nuestras en caso de conflicto.

El responsable del Gobierno central en Soria ha apuntado que mandará de forma inmediata el documento con las reivindicaciones de las organizaciones agrarias sorianas al Ministerio de Agricultura. Asimismo, ha agradecido el comportamiento de los manifestantes. Desde la Junta de Castilla y León, la delegada territorial ha mostrado buena predisposición a tomar en cuenta las reivindicaciones y ha asegurado que desde el Gobierno regional se apoya al campo provincial y así se seguirá haciendo con más intensidad.