La Consejería de Fomento y Medio Ambiente y la Guardia Civil desarrollan hasta el 28 de febrero la campaña ‘Operación Aire 2019’, que intensifica los controles a talleres e instalaciones industriales y agropecuarias sobre la utilización de combustibles no autorizados. Las emisiones de determinados combustibles repercuten negativamente sobre la salud de las personas y el medio ambiente.

En estas semanas se procederán a realizar servicios de vigilancia e inspección en talleres e instalaciones industriales y agropecuarias susceptibles de utilizar en calderas de calefacción o industriales combustible no autorizado, entre ellos, restos de biomasa tratada, plásticos y restos de otras sustancias utilizadas en la agricultura y la automoción. La quema de estos residuos en las calderas está prohibida por la normativa en materia de residuos, ya que las calderas no están diseñadas para este fin, y su incineración provoca emisiones contaminantes importantes con posibles repercusiones sobre la salud de las personas y el medio ambiente.

La campaña retoma los objetivos marcados ya el año pasado, entre ellos, concienciar a los operadores sobre la peligrosidad y repercusión negativa de estas prácticas para la salud pública y mejorar la calidad del aire en la Comunidad y, especialmente, en municipios de pequeño tamaño, donde es previsible que esta práctica esté más generalizada. La campaña se llevará a cabo en todas las provincias, aunque será más intensa en aquellas comarcas donde está presente la industria de la fabricación de muebles y otros derivados de la madera natural.