ASAJA de Ávila y ASAJA de Salamanca se muestran satisfechas tras conseguir la reivindicación de la liberalización de movimientos a cebaderos, impulsada en colaboración con otras asociaciones ganaderas, que ayer fue confirmada por el director general de Producción Agropecuaria de la Junta de Castilla y León, Jorge Llorente. La medida confirma que el intenso trabajo realizado desde esta Organización Agraria en silencio acaba beneficiando a todos los profesionales del sector vacuno.

ASAJA de Ávila y ASAJA de Salamanca se muestran satisfechas tras conseguir la reivindicación de la liberalización de movimientos a cebaderos, impulsada en colaboración con otras asociaciones ganaderas, que ayer fue confirmada por el director general de Producción Agropecuaria de la Junta de Castilla y León, Jorge Llorente. La medida confirma que el intenso trabajo realizado desde esta Organización Agraria en silencio acaba beneficiando a todos los profesionales del sector vacuno.

La libertad de movimientos a cebaderos, cuyo único destino después es el matadero, era una de las reivindicaciones impulsada por ASAJA y que trasladaron de primera mano los presidentes provinciales de ASAJA de Ávila, Joaquín Antonio Pino, y de Salamanca, Luis Ángel Cabezas, ante el máximo responsable en materia de sanidad animal del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Valentín Almansa.  

Uno de los objetivos de aquella reunión, celebrada en septiembre de 2012, era aliviar el perjuicio económico que sufren estos profesionales cuando pierden la denominada ‘tarjeta verde’ por culpa de algún animal positivo en las campañas de saneamiento realizadas por la Junta de Castilla y León.

Tras conseguir hace algunos meses la creación de los denominados ‘cebaderos sucios’, ahora se da el visto bueno a otra de las propuestas impulsadas por esta Organización Agraria y que permitirá al ganadero que sufra algún positivo poder vender los animales a cebaderos en condiciones económicas similares al resto de los ganaderos, en lugar de tener que cebarlos en su explotación o malvenderlos por su condición sanitaria.

Cabe recordar que el trabajo desarrollado por ASAJA también fue clave para conseguir que la propia explotación fuera considerada como unidad epidemiológica, medida que también alivió la presión del saneamiento a muchos ganaderos

Sin embargo, y pese a la satisfacción del objetivo conseguido, ASAJA propondrá a nivel regional la próxima semana nuevas medidas para mejorar el saneamiento ganadero y esa libertad de movimientos. Entre las propuestas de ASAJA, se encuentra la de incluir un nuevo tramo diferenciador en dichos movimientos. Esta Organización Agraria considera necesario incluir una cota de prevalencia del 4% para limitar los movimientos entre las distintas zonas. A juicio de  ASAJA, sería conveniente sanitariamente que los animales procedentes de zonas con más de un 4% de prevalencia de la enfermedad, sólo puedan ir a zonas que tengan más de un 4%.  ASAJA seguirá trabajando para que el importante esfuerzo realizado por los ganaderos en sanidad animal se vea recompensado con nuevas medidas en el futuro.