La Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (ASAJA) de Ávila ha remitido a los ayuntamientos de los municipios eminentemente ganaderos y a la Diputación Provincial una carta en la que se solicita el apoyo de los plenos municipales para una proposición en defensa de los ganaderos y de la actividad que éstos desarrollan en nuestros pueblos, contribuyendo a crear riqueza, empleo y a fijar población. También se pide el respaldo a los acuerdos adoptados entre OPAS y Junta de Castilla y León para controlar el creciente número de lobos y de ataques a la cabaña ganadera, así como posicionarse junto a los ganaderos ante la presión que ejercen las organizaciones ecologistas en contra de los mismos.
Representantes de ASAJA de Ávila y de Salamanca se reunirán de nuevo mañana con la Administración regional en la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, en el segundo de los tres encuentros concertados para el primer trimestre del año y que tienen como objetivo dar solución definitiva a los problemas que el lobo ocasiona a la ganadería. ASAJA pedirá diligencia en los compromisos adquiridos por el consejero en la primera reunión, celebrada en enero.
Asaja y otras organizaciones profesionales agrarias han hecho llegar a la empresa Azucarera Iberia su gran malestar por la decisión unilateral de la compañía de rescindir sus convenios de colaboración con las organizaciones profesionales agrarias para la venta de la semilla de remolacha a los agricultores miembros de los distintos colectivos.
La Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (ASAJA) de Ávila considera que tanto la Alianza UPA-COAG como UCCL por fin se han quitado por fin la careta de forma pública y reconocen, con sus declaraciones y sus actos, que su principal objetivo es criticar tanto a ASAJA como a sus dirigentes y al trabajo que realizan sus servicios técnicos, en una estrategia de enfrentamiento permanente que parece perseguir el deterioro de las relaciones institucionales entre las organizaciones agrarias, lo cual es altamente perjudicial para los intereses del sector.
El presidente de la Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (ASAJA) de Ávila, Joaquín Antonio Pino, ha solicitado hoy al delegado territorial de la Junta de Castilla y León, Francisco José Sánchez, que desde la Delegación abulense se articule la puesta en marcha en nuestra provincia de las medidas comprometidas por el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, para controlar la población del lobo. Por ejemplo, la participación de ganaderos y cazadores de la zona en la localización de ejemplares cuando se autoricen batidas.
Los representantes de ASAJA de Ávila y ASAJA de Salamanca que participaron ayer en la reunión con el consejero de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, valoran de forma positiva el encuentro y agradecen la disposición del consejero a solucionar un problema que está causando grandes pérdidas económicas al sector. Una disposición que no había en el equipo anterior de dicha Consejería.
ASAJA de Ávila y ASAJA de Salamanca han exigido hoy, ante la situación insostenible que sufren los ganaderos por los ataques diarios de lobos y la inoperancia y desidia de la Junta de Castilla y León, que se autorice a los ganaderos a participar en las batidas de control poblacional de cánidos. Es la manera más segura y eficaz de que se controle la población de fauna salvaje de forma rápida, protegiendo la actividad ganadera y se garantice su supervivencia en nuestro medio rural.
Los servicios técnicos de la Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (ASAJA) de Ávila impartirán un nuevo Curso de Incorporación a la Empresa Agraria (CIEA). Se trata de una formación íntegramente on line que dará comienzo el 8 de febrero y se prolongará hasta el 28 de abril. El plazo de inscripción se encuentra abierto.
La Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (ASAJA) de Ávila denuncia la insostenible situación que atraviesan los ganaderos de la provincia abulense, que sufren a diario los ataques del lobo a sus explotaciones y, además, la total desatención y ausencia de compromiso por parte de la Junta de Castilla y León, que no ha abonado aún ninguna de las indemnizaciones por los daños ocasionados por los cánidos durante 2015 y tampoco adopta las prometidas medidas de control poblacional de esta especie salvaje.
