La Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (ASAJA) ha recibido con sorpresa e indignación las declaraciones de los administradores de la industria quesera Rofer acusando a la organización agraria de contribuir a la quiebra de dicha empresa.

LOS ADMINISTRADORES Y ABOGADOS DE ROFER QUIEREN CONVERTIR A LAS VICTIMAS EN VERDUGOS

La Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (ASAJA) ha recibido con sorpresa e indignación las declaraciones de los administradores de la industria quesera Rofer acusando a la organización agraria de contribuir a la quiebra de dicha empresa.

La organización agraria no entiende cómo quienes han arruinado una empresa, manteniendo con más de un centenar de ganaderos deudas cuantiosas, en vez de asumir sus responsabilidades, pretenden utilizar los medios de comunicación para hacer a otros partícipes de una situación lamentable derivada de una nefasta gestión de la que podrían incluso derivarse responsabilidades penales.

El gabinete jurídico Alvarez Higuera Abogados, que asesora a ASAJA, rechazó el convenio de acreedores debido a que no se presentó ningún proyecto, con nombres y apellidos, que abriese la más mínima posibilidad de futuro para la empresa, y lo único que se pretendía era una quita del cincuenta por ciento de la deuda de los ganaderos. Por el contrario, nadie pidió ningún sacrificio a los trabajadores, a los bancos con créditos hipotecarios, ni a las propias administraciones públicas. Tampoco se le ha pedido ningún sacrifico al despacho jurídico de José Luis Merino García, contratado por los administradores de Rofer, un despacho que lejos de solucionar el problema, se ha convertido en un problema en sí mismo al actuar de «espanta empresarios», imposibilitando el logro de acuerdos.

En todo caso, ASAJA quiere dejar claro que los ganaderos a los que representa soportan el 20 por ciento del pasivo, cuando era necesario un 60 por ciento para aceptar el convenio de acreedores, lo que supone que hubo otros muchos afectados que no vieron ninguna salida en la propuesta de los administradores. Por otra parte, ASAJA quiere también manifestar que consideró como un intento de soborno el ofrecimiento que se le hizo, y que por supuesto rechazó, de un puesto en el Consejo de Administración, algo que además no tenía sentido alguno al no participar los ganaderos en el accionariado.

La organización agraria ASAJA reitera su compromiso con los ganaderos afectados, a los que seguirá defendiendo por la vía judicial y sindical, y estará como siempre receptiva a escuchar a quien de buena fe presente cualquier propuesta seria que permita el cobro de la deuda y reiniciar la actividad de la empresa. Y todo sin esperar nada a cambio, no como otros que sacan más tajada cuanto peor van las cosas.

León, 2 de junio de 2004.