El Parlamento Europeo ha aprobado con 411 votos a favor, 100 en contra y 78 abstenciones, una nueva legislación que impone aranceles de hasta el 100 % a los fertilizantes nitrogenados procedentes de Rusia y Bielorrusia, como medida de presión por la guerra en Ucrania. Los aranceles, que entrará en vigor el próximo 1 de julio y se aplicará de forma progresiva durante tres años, ha sido adoptada sin una evaluación seria del impacto que tendrá sobre los agricultores europeos.

EP Mini-Plenary Session – Formal sitting – Address by Nataša PIRC MUSAR, President of the Republic of Slovenia

Desde ASAJA se denuncia que esta decisión castiga, una vez más, al eslabón más débil de la cadena: los productores agrarios, que ya sufren costes disparados, incertidumbre en los mercados y una fuerte dependencia de insumos importados. “En un momento en que la seguridad alimentaria debería ser una prioridad estratégica para Europa, se vuelve a dejar al campo fuera de la ecuación”, critican.

Todos los eurodiputados españoles del PP y el PSOE (excepto Elena Sancho Murillo) han votado a favor de esta propuesta. De los eurodiputados españoles de VOX, 5 han votado en contra, excepto Jorge Buxadé, que no ha votado. También han votado en contra Alvise Pérez, de SALF y Estrella Galán, de Sumar. Se han abstenido Irene Montero de Podemos y Nora Junco y Diego Solier de SALF.

ASAJA lamenta que ni siquiera se aceptaran las enmiendas centradas en flexibilizar la Directiva sobre Nitratos mediante el uso de fertilizantes RENURE -clave para permitir el uso de fertilizantes orgánicos regenerados- y en establecer mecanismos de transparencia y mitigación del impacto económico. “Se nos impone una restricción sin alternativas viables y sin levantar, por ejemplo, los derechos antidumping a fertilizantes de países como EE.UU. o Trinidad y Tobago”, señalan.

ASAJA reclama un “Plan B” que incluya:

  • La eliminación de aranceles y medidas antidumping a fertilizantes de países alternativos.
  • La reforma inmediata de la normativa que impide el uso eficiente de nutrientes RENURE.
  • La puesta en marcha de mecanismos automáticos de salvaguarda si los precios se disparan.
  • Compensaciones directas ante la subida de costes.

“Sin fertilizantes asequibles, no hay producción viable. Y sin rentabilidad, el abandono de tierras cultivables será inevitable”, advierte ASAJA. La organización seguirá trabajando para que Europa rectifique antes de que sea demasiado tarde