Rugen los tractores de nuevo. Hoy ASAJA ha participado en la protesta convocada por COPA COGECA en  Estrasburgo, sede del Parlamento Europeo, en defensa de una PAC justa para el campo español y de un presupuesto sólido que garantice el futuro del sector. Hoy los agricultores europeos denunciamos que la nueva PAC supondrá una amenaza para la competitividad del sector, una mayor carga administrativa mayor y más compleja, y más incertidumbre para los agricultores.

ASAJA prevé un invierno conflictivo si los políticos no escuchan las demandas de los agricultores y ganaderos. “Las lindas palabras no bastan, necesitamos un compromiso serio y explícito en el presupuesto comunitario”, apunta la OPA.

ASAJA advierte que la situación del campo, y especialmente de algunos sectores como el cerealista, «es muy complicada, tras varias campañas de precios inaceptables, golpeados por la imposición de acuerdos internacionales en los que la agricultura ha sido moneda de cambio”. Este contexto, junto al temor por los cambios negativos que supondría la nueva PAC de aprobarse en sus términos actuales, está encendiendo todas las alarmas, y es yesca para la protesta.

Líneas rojas

El COPA (Organizaciones agrarias europeas) y la Cogeca (cooperativas agrarias) consideran inaceptable la propuesta de reforma de la PAC y marco presupuestario de la UE, ya que traspasa numerosas líneas rojas que ponen en peligro el futuro del sector.

“Se nos prometió una visión clara y una brújula fiable. En cambio, recibimos discursos grandilocuentes y acciones políticas que iban en la dirección contraria. La agricultura ha quedado relegada”. La pelota está ahora en el tejado de los colegisladores: el Parlamento Europeo y el Consejo. Muchos diputados al Parlamento Europeo comparten nuestras preocupaciones.

Los diputados al Parlamento Europeo y los Estados miembros no deben permitir que se aprueben estas propuestas deficientes. Una solución mejor y más equilibrada es posible y necesaria: una que respete la estructura de dos pilares de la PAC, garantice un presupuesto específico y a prueba de inflación, y se mantenga fiel a los Tratados de la UE.