Seis días después de la apertura del periodo de solicitud de los pagos compensatorios de la PAC aparecen publicados en el Boletín Oficial de Castilla y León los índices de retirada válidos para esta campaña. Un retraso innecesario e injustificado, que ha obligado a muchos agricultores a realizar siembras en malas condiciones, multiplicando los costes, y a presentar su solicitud atendiendo a los porcentajes antiguos, por lo que tendrá que ser revisada de nuevo.

Seis días después de la apertura del periodo de solicitud de los pagos compensatorios de la PAC aparecen publicados en el Boletín Oficial de Castilla y León los índices de retirada válidos para esta campaña. Un retraso innecesario e injustificado, que ha obligado a muchos agricultores a realizar siembras en malas condiciones, multiplicando los costes, y a presentar su solicitud atendiendo a los porcentajes antiguos, por lo que tendrá que ser revisada de nuevo.

ASAJA ha denunciado la tardanza con la que la Administración ha dado a conocer los índices de barbecho, por considerar que se conocía de antemano y desde hace meses que las condiciones climáticas iban a impedir un laboreo normal. Para la OPA, sólo se puede entender este retraso en términos electorales, “que de algún modo se quisiera hacer creer al agricultor que se le estaba regalado a última hora algo que no le pertenecía”. ASAJA recuerda que es la propia normativa de la Unión Europea la que faculta a las Comunidades Autónomas para ampliar los porcentajes de barbecho en casos como el actual, “por lo que es lamentable que, año tras año, la Consejería nos obligue a solicitar una y otra vez, en plan rogativa, que amplíe la retirada”, subraya ASAJA.

Finalmente, en el BOCyL de hoy se puede comprobar que los índices iniciales (5 por ciento de retirada obligatoria y 15 de voluntaria) se han ampliado a un 40 por ciento en secano y un 30 por ciento en regadío. “Se confirman así las cifras proporcionadas por el consejero días antes a algunos amigos, que por lo visto no es nuestro caso”, apunta la OPA. ASAJA entiende que lo lógico y justo sería proporcionar a las OPAS esta información con celeridad si, tal como gusta de apuntarse en los boletines oficiales, la normativa se aprueba “oídas las organizaciones agrarias”. Pero, por lo visto, “consultar, sí que se consulta, pero para olvidar inmediatamente lo pedido”, afirma ASAJA que, por cierto, en esta ocasión había pedido una retirada de hasta el 50 por ciento en secano y del 30 en regadío.