Las escasas precipitaciones también repercuten en la falta de alimento para la cabaña ganadera. Debido a la sequía, y de forma excepcional, el Servicio de Medioambiente de la Junta de Castilla y León adelantó el ramoneo para ganado al pasado jueves, 15 de agosto, tanto para las tareas del olivo como para el desmoche del fresno. Además, a partir del 15 de septiembre solo estará permitido en el caso del olivo y el roble.

La escasez de precipitaciones provoca un estrés hídrico en estas especies arbóreas que hace que pierdan sus hojas. Por ello, la administración ha decidido adelantar el plazo del ramoneo, que habitualmente comienza el 1 de octubre.