ASAJA Salamanca lamenta la actitud mostrada hoy por el sector comprador en la primera semana de cotización de la mesa de la patata en la Lonja de Salamanca, donde se han negado a poner precio, con una clara intención de ocultar a los profesionales del sector la realidad del mercado, cuando en el campo se están haciendo operaciones por valor de 32 céntimos de euro el kilo.

La Organización Profesional Agraria salmantina, que la semana pasada solicitó a la Diputación el inicio de la mesa de la patata por las numerosas operaciones que se hacen en campo y ante la necesidad de orientar a los profesionales del campo, considera inaceptable la actitud que han mostrado hoy en la Lonja los compradores, negándose a cotizar, y convirtiendo en rehén al presidente de la Mesa de la Patata de una decisión que no se ajusta a la realidad, con la única intención de buscar su beneficio al crear inestabilidad el mercado, en un claro perjuicio para el productor.

ASAJA Salamanca defiende que en estos momentos la realidad del mercado indica que las operaciones se están realizando en campo a 32 céntimos de euro el kilo en variedades como la Jaerla y similares, mientras que en la patata roja, el precio es de 30 céntimos de euro el kilo.

Ante la escasez que presenta el mercado, la industria, que se está viendo obligada a comprar patata vieja en Francia, está presionando a los productores para arrancar la patata con contrato antes de que finalice su ciclo vital. En estos casos, lo recomendable para el productor es esperar a que la patata adquiera una buena calidad para no perder rendimiento en kilos.

Las malas condiciones climatológicas del pasado invierno provocaron que la siembra de la patata en Salamanca sufriera un fuerte retraso. Por ese motivo, en estos momentos en Salamanca se ha arrancado aproximadamente el 15% de las 4.568 hectáreas sembradas. Ante la incertidumbre que los compradores quieren crear en el mercado, desde ASAJA Salamanca se recomienda a los productores salmantinos que realicen un arranque escalonado, con el fin de obtener un producto madurado y en buenas condiciones.