La organización agraria solicita a la Junta un apoyo real para los ganaderos afectados

20 de septiembre de 2021 | ASAJA Salamanca insta a la Junta de Castilla y León que ampare a los ganaderos afectados por los ataques de buitres al ganado vivo, mediante la celeridad en la atención de los casos, que se personifiquen -cuanto antes- agentes medioambientales a la explotación y, además, implante -de una vez por todas- un sistema de compensación económica y resarcimiento.

Ésta es la petición lanzada por ASAJA Salamanca por enésima vez tras conocer un nuevo ataque de buitres, el 17 de septiembre de 2021, a una explotación de San Pedro de Rozados, en la provincia charra.  Según los regentes de la explotación, “uno de los terneros de dos meses se hizo daño en los cuartos traseros y le costaba levantarse”, por lo que fueron a suministrarle antiinflamatorios y no les dio tiempo. Cuando llegaron, el ternero se encontraba vivo –tal y como se puede apreciar en el vídeo- pero con los ojos, hocico, ano y cola comidos por los buitres. “Ya nada se podía hacer por él”. Así, el encargado se retiró para buscar el tractor y llamar al servicio de recogida de cadáveres. “Cuando volví, solo quedaban algunos huesos y la piel”, lamenta.

La organización agraria recuerda a la administración regional que ya son cuatro comunidades autónomas las que contemplan resarcimientos a los ganaderos que sufren daños en la explotación por estas aves: Madrid, La Rioja, Castilla La Mancha y País Vasco. En repetidas ocasiones, ASAJA Salamanca ha aclarado que los buitres han cambiado su modo de alimentación, pasando de carroñeras a depredadoras y, aunque no puedan atacar animales grandes ya que carecen de fuerza prensil en sus garras, aprovechan una debilidad, como cuando una reproductora está pariendo o un ternero es recién nacido o no se levanta por algún motivo, como en este caso, nada fuera de lo normal y no tienen que estar especialmente enfermos para sufrir los ataques de los buitres.

ASAJA Salamanca recuerda a todos los afectados que está elaborando un censo con los ataques de buitres y meloncillos para presentar a la Junta de Castilla y León, por lo que se requiere colaboración para denunciar estos hechos.