Todos los titulares de explotaciones de ovino, caprino, porcino, avicultura (no autoconsumo) y apicultura están obligados a declarar en las unidades veterinarias el número total de sus animales que tenían a fecha 31 de diciembre de 2022, incluso si esa cifra es 0. Si después incrementan el censo, tendrán que hacer otra declaración censal. El plazo para realizar este trámite finaliza el 28 de febrero.