Pese al rechazo mayoritario, es facultad de la CHD elevarlo al Gobierno

El viernes, 8 de abril, se celebró el Consejo del Agua de la demarcación hidrográfica del Duero, convocado por la Confederación Hidrográfica del Duero para presentar el informe sobre el proyecto del Plan Hidrológico del Duero antes de ser elevado al Gobierno para su aprobación. Sometido a la votación, ha sido rechazado por los vocales del Consejo, con un resultado de 42 votos en contra y 34 a favor. Se trata de un rechazo inédito en la historia de los planes hidrológicos del Duero, que siempre habían recibido el apoyo mayoritario del Consejo del Agua.

ASAJA de Castilla y León votó en contra, postura que ya había anunciado desde el primer momento, por considerar que el nuevo Plan Hidrológico del Duero «atenta frontalmente contra los intereses del sector agrario». A su rechazo al proyecto, se sumaron el resto de los vocales de las organizaciones agrarias, y también comunidades de regantes. Especialmente significativo fue el voto negativo de la Junta de Castilla y León, la administración que ejerce las competencias agrarias y medioambientales. También votaron en contra la CEOE, en representación de los empresarios de la comunidad autónoma; y, por razones distintas, Comisiones Obreras y parte de los colectivos ecologistas.

Para ASAJA, resulta significativo que el proyecto de PHD, defendido por la Confederación Hidrográfica del Duero -y, por tanto, del Ministerio de Transición Ecológica, del que depende el organismo- haya contado con el apoyo sin fisuras de los representantes de las empresas hidroeléctricas. Para ASAJA: “una vez más resulta evidente el alto grado de desconexión de la realidad que tiene el Gobierno en temas básicos para nuestra tierra, así como su nula capacidad de escuchar a las partes afectadas y conciliar intereses”.

Lo cierto es que, pese al rechazo mayoritario del proyecto de PHD, es facultad de la Confederación elevarlo al Gobierno, a través del Ministerio de Transición Ecológica, para que, si así lo decide, se apruebe como Real Decreto, “pero tendrán que arrastrar el voto negativo del Consejo del Agua, algo que nunca había ocurrido y que debería hacerles reflexionar y rectificar”, apunta ASAJA.