ASAJA denuncia un nuevo ataque de buitres en una explotación de ovino en la provincia de Salamanca. En los últimos siete días las aves carroñeras han matado a 11 ovejas de pura raza churra causando unos daños valorados en 2.500 euros.

Un joven ganadero de Villarino de los Aires ha visto en la última semana como los buitres le han matado en tres ataques sucesivos hasta 11 ovejas inscritas en el Libro Genealógico de la Raza Churra. Estas ovejas están valoradas en más de 100 euros por cabeza, causándole una pérdida superior a los 1.100 euros. Además, al estar en proceso de gestación el lucro cesante por los corderos perdidos supera los 1.300 euros.

En esta ocasión, los buitres esperan pacientemente en grupo las horas de sesteo de las ovejas y su avanzado estado de gestación para atacarlas y matarlas.

Por otra parte, ASAJA Salamanca ha denunciado reiteradamente que el exceso de burocracia que conlleva para el ganadero el demostrar los ataques de los buitres, se traduce en que muchos de ellos opten por no denunciar las pérdidas que le causan estas aves necrófagas al atacar a sus animales hasta matarlos.

Estos ataques demuestran la nula efectividad que está teniendo el Decreto de Aves Necrófagas publicado por la Junta de Castilla y León para regular la alimentación de estas aves carroñeras. Las numerosas condiciones que exige para la creación de muladares, se ha traducido en un escaso interés de los ganaderos por solicitarlo, como han evidenciado los primeros datos facilitados por la propia Junta de Castilla y León.

Tal y como vaticino ASAJA Salamanca, el Decreto de Aves Necrófagas no ha evitado que los buitres sigan atacando a animales vivos hasta matarlos, ni ha servido para que los ganaderos que han solicitado la instalación de muladares se ahorren el coste del seguro.

ASAJA Salamanca solicita a la Junta de Castilla y León que ante la reapertura del plazo, el próximo mes de enero, para volver a solicitar la instalación de muladares en la provincia de Salamanca se reconsideren los requisitos exigidos a los ganaderos.