ASAJA Salamanca, junto con UPA y COAG, ha participado este miércoles en un encuentro celebrado en Villar de Peralonso con el objetivo de acompañar y respaldar a los agricultores, ganaderos y apicultores que se han visto gravemente perjudicados por el incendio iniciado en Cipérez, que ha arrasado más de 10.500 hectáreas y se ha convertido en el mayor desastre forestal de la historia de la provincia.

Ante más de un centenar de ganaderos de la comarca de Vitigudino, el presidente provincial de ASAJA, Juan Luis Delgado, destacó la necesidad de mantener la unidad en momentos tan complicados: “Los agricultores y ganaderos no entienden de siglas, y nosotros tampoco. Lo que queremos demostrar es que estamos juntos y que trabajaremos con una sola voz para defender a nuestros profesionales del campo”.

Pérdidas millonarias y un futuro incierto

Las primeras valoraciones apuntan a pérdidas de enorme magnitud, tanto por la destrucción de forrajes y paja almacenados para varios años como por los daños a instalaciones y maquinaria. Solo en alimentación de ganado vacuno, se estima un coste adicional de 2 euros diarios por animal, lo que multiplica de forma alarmante el impacto económico en las explotaciones.

Delgado recordó que el incendio ha truncado un año especialmente bueno en el campo, lo que agrava aún más las consecuencias: “No hablamos solo de lo que se ha quemado, sino de lo que se había logrado guardar tras una campaña excepcional”.

Ayudas y burocracia

Durante el acto, los representantes de las organizaciones agrarias alertaron de la complejidad burocrática que acompañará a la solicitud de ayudas. La aplicación de la Ley de Montes, que prohíbe el pastoreo en terrenos quemados durante cinco años, y la condicionalidad de la PAC, son solo algunos de los obstáculos con los que se toparán los afectados.

ASAJA Salamanca se compromete a asesorar y acompañar a los ganaderos y agricultores en este proceso para que puedan acceder al mayor número posible de ayudas. “Estaremos al lado de todos los afectados para guiarlos en la tramitación y que reciban lo antes posible el apoyo que necesitan”, subrayó Delgado.

Solidaridad y petición de Zona Catastrófica

El encuentro también sirvió para organizar el envío de paja y forraje a las explotaciones damnificadas y solicitar transporte gratuito que facilite el reparto de estas donaciones.

Asimismo, se decidió que los alcaldes de los municipios afectados allí presentes, solicitaran al gobierno la declaración de zona afectada gravemente por una Emergencia de Protección Civil.

ASAJA Salamanca reitera su compromiso con el campo charro y exige a las administraciones que las ayudas sean rápidas, eficaces y acordes a la magnitud del desastre. La organización subraya que el futuro de muchas explotaciones familiares depende de que las respuestas no se queden en promesas, sino que se traduzcan en soluciones reales.