Cerca de 1.300 jóvenes, hombres y mujeres de todos los puntos de la región, acudieron el pasado 23 de febrero a Valladolid para asistir a la Convención de Jóvenes Agricultores de ASAJA de Castilla y León.

Cerca de 1.300 jóvenes, hombres y mujeres de todos los puntos de la región, acudieron el pasado 23 de febrero a Valladolid para asistir a la Convención de Jóvenes Agricultores de ASAJA de Castilla y León. Para la OPA, este acto, muy importante por su magnitud y también porque los asistentes son la semilla del campo del futuro, marca el camino a seguir y refuerza el compromiso de la organización líder de la Comunidad Autónoma con los jóvenes agricultores y ganaderos.

Hay cerca de 4.000 jóvenes agricultores y ganaderos (atendiendo a la normativa, los menores de 40 años) socios de las distintas organizaciones provinciales de ASAJA, por lo que en el acto celebrado en Valladolid estaba presente algo más de la cuarta parte de este colectivo. Cierto es que cada año en Castilla y León se pierden 2.000 activos en el campo y se incorporan solo 500, pero con este acto ASAJA quería dejar constancia de que la juventud agraria existe, que está peleando y merece un futuro y que debe ser tenida en cuenta a la hora de diseñar cualquier política –agraria, económica, social–.
Juan Vicente Herrera, presidente de la Junta de Castilla y León, subrayó la importancia de esta convención, y recordó que la agricultura “no es un sector obsoleto, ni al que haya que acompañar para su decadencia, sino que es un sector económico muy importante para la Comunidad”. Herrera apuntó que hablar de joven agricultor y ganadero “es hacerlo del joven empresario, que es la clave de la competitividad”.
El presidente de la Junta señaló tres claves principales como motor de futuro del campo. En primer lugar se refirió a la necesaria competitividad de las explotaciones agrarias, a través de la incorporación de innovación tecnológica y de la mejora de las explotaciones. El presidente también reconoció que para hablar de competitividad es necesario equilibrar y hacer más justa la cadena de valor para que las producciones tengan unas retribuciones adecuadas. Entre las fórmulas de apoyo para conseguir alcanzar la competitividad se ha referido a las figuras de calidad implantadas en Castilla y León, apostar por la formación, adaptarse a las necesidades del mercado, así como apostar por la incorporación de la mujer a las explotaciones agrarias.
La segunda clave para el futuro del sector agrario de Castilla y León pasa por el rejuvenecimiento y relevo generacional para lo que anunció entre otras medidas la creación de una Oficina de Apoyo a Jóvenes Emprendedores en el Sector Agrario con la que se pondrá en marcha un modelo de información y captación de jóvenes agricultores y ganaderos emprendedores que tendrá una base en las Escuelas de Capacitación Agraria. En este sentido, remarcó que el objetivo es procurar una administración agraria “mucho más sencilla y simple, digital y telemática”.
Por último, el presidente habló sobre la nueva PAC, ante la cual la Junta de Castilla y León está proponiendo que se incorpore a esta política comunitaria el denominado Componente Joven que permita rejuvenecer el sector agrario europeo y por tanto el regional, con propuestas que se dirigen a concentrar la innovación en el sector joven. Herrera recordó la posición de Castilla y León ante la nueva PAC, que establece que la reforma debe marcarse como una prioridad de Estado con el objetivo de conseguir la máxima financiación posible.

“Plantar batalla”
Por su parte, Donaciano Dujo, presidente de ASAJA de Castilla y León, quiso lanzar un mensaje de optimismo y compromiso ante los jóvenes reunidos en Valladolid.”Para que los jóvenes sean protagonistas de su propio futuro, tienen que asumir responsabilidades, no solo en las explotaciones a las que se incorporan, sino también en los diferentes ámbitos de la sociedad en los que se tomen decisiones que les afecten desde ayuntamientos a organizaciones agrarias, pasando por cooperativas o cualquier otra estructura. “Nadie mejor que vosotros puede defender lo vuestro”, subrayó. También advirtió sobre el descenso de activos y recalcó que es “vital” no descender de una cifra que permita seguir asegurando producciones y la vertebración del territorio, “por lo que cada nueva incorporación tiene que ser apoyada al máximo”.
Donaciano Dujo señaló que “no hemos venido aquí a llorar, sino a plantar batalla por el futuro. Ya hace mucho que se acabó el estereotipo de la boina, los jóvenes agricultores de hoy tienen una gran formación profesional y están al día en nuevas tecnologías, y hay que atender sus necesidades específicas”. Así, pidió planes de formación continua adaptados al territorio y condiciones de trabajo de este colectivo, así como banda ancha de Internet para todo el territorio regional.
Por su parte, Pedro Barato, presidente nacional de ASAJA, apeló a las nuevas generaciones como depositarias del “gran hacer” de sus antepasados: “porque si hoy se puede hacer un parque natural no es porque se le haya ocurrido a un funcionario, es porque generaciones enteras han sabido cuidar ese territorio”. Además, el líder nacional de ASAJA advirtió sobre la trascendencia de la negociación de la nueva PAC, “ya que por ahora no hay nada de nada claro” y reclamó claridad en la cadena de valor que fija los precios agroganaderos “porque si lo nuestro no vale no hay futuro posible”.
La convención de ASAJA, que fue clausurada con la intervención de la consejera de Agricultura y Ganadería, Silvia Clemente, contó también con las ponencias de Cristina Carrasco Lorente, responsable de la Unidad de Análisis y Prospectiva de la PAC en la DG-AGRI (Comisión Europea), y Carmelo Troccoli, secretario nacional de Coldiretti-Giovanni Impresa / CEJA.