Nuestra gente

José Mª se ha instalado como agricultor a sus 27 años en Pedraza, una pequeña localidad de Campos (Palencia) donde proseguirá la tradición agrícola de su familia.

Este ganadero y alcalde de Papatrigo (Ávila) se introdujo en el mundo de la agricultura y ganadería hace tan sólo diez años, para continuar con una explotación familiar tras la jubilación de su padre y de su tío.

Hace más de tres años que decidió dedicarse a lo que más le gusta: el campo, la agricultura y la ganadería.

Tras licenciarse en Veterinaria, y trabajar fuera “de casa”, Fernando Tejerina -30 años- decidía continuar la aventura que un día inició su padre con una explotación intensiva de ganadería de ovino en plena Tierra de Campos, en Autillo (Palencia).

A Mario le harían falta días de 30 horas para poder estar un poco en todas partes. Tiene el trabajo por triplicado –como agricultor de secano, y ganadero de vacuno y de porcino, y cuando puede haciendo trabajos de agricultura para otros– pero le resulta difícil apostar sólo a una carta.

José Luis es un agricultor de la zona de Serón de Nágima, a unos 50 kilómetros al sureste de Soria. Se dedica a la agricultura como profesional desde los 18 años y ahora tiene 44, aunque reconoce que ha sido agricultor desde crío porque ayudaba a su padre en las tareas del campo.

Lo tuvo claro desde muy joven, y con 18 años tomó el relevo en la ganadería familiar. En casa siempre habían tenido vacuno de extensivo, aunque él ha multiplicado la cabaña, pasando de las 34 vacas de su padre a las doscientas y pico actuales.

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Para Matías, el campo ha sido una vocación durante más de tres décadas de su vida y él solo se ocupa de todas sus parcelas, que ocupan más de 300 hectáreas, la gran mayoría de cereal, pero desde hace dos años ha apostado por la colza como cultivo de rotación.

Cuando uno llega a la edad de Luis Ángel, a los sesenta años, intenta medir cada paso doblemente. Lógicamente, se desea seguir obteniendo los mejores resultados de la explotación, pero también se hace un esfuerzo por limitar las inversiones.

Tiene una explotación agraria de secano, en la que aproximadamente un 80 por ciento de las tierras en producción las dedica al cereal, y el resto al girasol, en Valverde del Majano, a pocos kilómetros de la capital segoviana.